El syrup se obtiene cocinando los frutos con agua y azúcar, lo que resulta en un jarabe dulce y sabroso con un sabor frutal distintivo. Además de su delicioso sabor, el syrup se valora por sus propiedades antioxidantes que ofrecen beneficios para la salud, como la protección contra el daño celular causado por los radicales libres.